El nombramiento de la vocera de Perú Libre, Kelly Portalatino, como nueva ministra de Salud no solo demuestra la existencia de la cuota cerronista en el gabinete, también retrasará el trámite de la denuncia constitucional del suspendido parlamentario Freddy Díaz, acusado de violación sexual por una extrabajadora de su despacho.
Portalatino Ávalos, actualmente, es la encargada de elaborar el informe final de las denuncias constitucionales acumuladas 284 y 286. Se le delegó dicha responsabilidad en la sesión de la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales celebrada el viernes 21 de octubre. La Comisión Permanente otorgó para su presentación hasta 15 días hábiles.
Los plazos son importantes en este procedimiento parlamentario. Según el artículo 89 del Reglamento del Congreso, el legislador delegado presenta un primer informe sobre determinación de hechos y pertinencia de pruebas en un plazo no mayor de cinco días hábiles tras recibir la encomienda.
Entre la delegación y la designación de Portalatino Ávalos en el Ministerio de Salud transcurrió apenas un día hábil, debido a que la subcomisión acordó suspender los plazos procesales entre el 24 y 28 de octubre por la semana de representación.
Para el exoficial mayor del Congreso Hugo Rovira, es “probable” que el grupo de trabajo que preside la parlamentaria de Alianza para el Progreso Lady Camones delegue el caso a otro congresista que integra la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales.
No obstante, Rovira precisa que Portalatino podría seguir a cargo del expediente si es que lo desea. Recordó que otros parlamentarios que al mismo tiempo son ministros de Estado, como Roberto Sánchez (Comercio Exterior y Turismo), participan de sesiones del pleno e incluso comisiones ordinarias. “El hecho de que un congresista sea ministro no le quita derechos parlamentarios”, apuntó el exoficial mayor.
